En la entrada de mi
"top al curry" os contaba que había conseguido ese color amarillo tan bonito tiñendo la tela con cúrcuma.
¿Qué cómo se me ocurrió la idea? Después de usar tinte químico para aprovecha una tela manchada y hacer esta camiseta, empecé a investigar acerca de los tintes naturales. Los industriales contienen un montón de sustancias tóxicas que, además de contaminar, limitan su uso con niñ@s.
Descubrí que, además del índigo (que era el único que conocía), hay un montón de "materiales" naturales con los que teñir tejidos (principalmente algodón y seda) y lana. Desde especias, hasta hojas, semillas, corteza de determinados árboles, raíces... En
este tablero tenéis parte de la información que he encontrado sobre el tema.
No me enrollo más, ¡vamos al lío!
MATERIALES
- Tela lavada.
- Alumbre de potasio: un 10% del peso de la tela. (Es la sal con la que hacen el desodorante de alumbre).
En algunos sitios indicaban simplemente el uso de vinagre, pero yo tenía alumbre molido en casa así que lo aproveché.
- Vinagre: una taza/aprox. 250ml por cada litro de agua (yo usé vinagre blanco concentrado del que se usa para limpiar, pero sirve también el "comestible", siempre y cuando sea de manzana o de vino blanco)
- Cúrcuma en polvo.
- Guantes y recipientes.
PASO A PASO
1. Preparamos el baño de mordientes (las sustancias que vamos a usar para fijar el tinte a la tela, en este caso el alumbre y el vinagre). En el recipiente elegido disolvemos el alumbre (yo he usado un barreño grande de plástico) en agua muy caliente, la he echado practicamente hirviendo, y añadimos el vinagre.
2. Introducimos la tela, asegurándonos de que se moja por completo y que se mantiene bajo la superficie del líquido. Dejamos reposar durante 1 hora.
Pasado ese tiempo escurrimos la tela sin aclararla, no es imprescindible teñirla en este momento, podemos teñirla más adelante pero siempre mojándola de nuevo para que el tinte se reparta uniformemente.
3. Si vamos a teñirla inmediantamente después podemos empezar a preparar el tinte aproximadamente a la media hora de haber introducido la tela en el baño de mordientes.
En una cazuela echamos agua suficiente como para cubrir la tela y añadimos la cúrcuma, para el tono que visteis en el "top al curry" yo usé 4 litros de agua y una cucharada sopera de cúrcuma por cada litro.
Llevamos la mezcla a ebullición, removiendo de vez en cuando para que no queden grumos, y dejamos hervir durante unos 15 min.
4. Colamos el líquido con un paño o gasa finos, para eliminar el exceso de cúrcuma, que queda almacenado en forma de pasta amarillenta. Yo usé parte de esa pasta para hacer un arroz riquísimo ese día y el resto lo he congelado en un molde de cubitos de hielo para irlo usando más adelante, no diréis que eso no es aprovechar recursos!! Jejeje.
5. Introducimos la tela mordentada en el tinte (en un recipiente que no usemos para cocinar, yo usé el barreño del paso 1), removiéndola para que el tinte se reparta uniformemente y asegurándonos de que queda totalmente sumergida.
6. El tiempo de reposo varía, cuanto más tiempo esté la tela en el tinte, más oscuro y anaranjado será el amarillo resultante. Yo la dejé un cuarto de hora más o menos.
Una vez pasado el tiempo que consideremos necesario escurrimos la tela y la aclaramos con agua fría hasta que esta corra transparente.
7. Dejamos secar lo más horizontal posible a la sombra.
8. ¡A cavilar qué hacer con ella!
Espero que haya quedado todo más o menos claro, si no, no dudéis en preguntar.
Mis siguientes ideas para experimentar:
- Judías negras: tono azul apagado/violáceo.
- Corteza de eucalipto: tonos anaranjados.
- Piel de nueces (la piel que recubre la cáscara dura): tonos marrón oscuro y además NO NECESITA MORDIENTES para fijarse.
- Agallas de los robles y bellotas: tonos gris muy oscuro/negro.
Por último un pequeño apunte, si queréis teñir con bayas (moras, arándanos, etc., ya sabéis, esas que dejan unas manchas que no hay quien quite) durante el mordentado hay que usar sal en lugar de vinagre. El vinagre es válido cuando queremos teñir con plantas, ya sea usando las hojas, la raíz, corteza...
Ya me contaréis vuestros resultados si os animáis a probar.