Ella, que es más maja que las pesetas, nos invitó a la fiesta y encima nos puso el vestido para que fuésemos monas.
Para intentar emular a la maestra quedamos en hacernos fotos tocándonos los pelos, a ver si conseguíamos salir tan sexis como ella.
Ejem, a la vista está el resultado.
Ya he dicho en ocasiones anteriores que me encanta coser en compañía, pero esta vez más aún, el grupo del Ttakun ha sido una caja de sorpresas: hemos descubierto dónde van las tallas de sujetador perdidas, el pelo de los tíos, cómo es un profe de escalada casi perfecto... y anoche hicieron que estuviese corrigiendo exámenes hasta las tantas con una sonrisa.
¡¡Un placer chicas!! ¡Gracias Nekane por el patrón y la fiesta!
Patrón Ttakun de Hirutxoak.
Telas de camiseta de Cal Joan.
Pelos de Macario con rotulador chungo que no se quitaba ni con estropajo.
